Así como lo lees en el título la vitamina C tiene la facultad de debilitar a las células cancerígenas. ¿Cómo lo logra? Engañando al organismo. Ya que desde el punto de vista estructural la vitamina C es muy similar a la glucosa que es el alimento de las células tumorales. Entonces, la lógica terapéutica es hacer actuar a la vitamina C como un simulador de glucosa.

Este reemplazo bioquímico provoca una crisis energética en las células tumorales que al no recibir glucosa se quedan transitoriamente sin energía y eso permite que se desencadenan mecanismos de muerte en las células cancerígenas. Luego, es el sistema inmune el encargado de expulsar a los "muertos" del organismo.

El potencial terapéutico de la vitamina C en el cáncer radica en este mecanismo. Al administrar grandes cantidades de vitamina C, se promueve la formación de DHA, que luego es absorbido por las células cancerígenas, resultando en un aumento del estrés oxidativo y potencialmente inhibiendo el crecimiento tumoral.

Claro que para lograr este efecto se deben utilizar megadosis de vitamina C (sobre 2.000 mg). Lo que por vía oral es imposible administrar ya que esa concentración tan alta produce efectos adversos en el aparato digestivo, que por dónde se absorbe la vitamina C al consumirla por la boca. 

Además, fisiológicamente el cuerpo tiene una capacidad limitada de absorber vitamina C por vía oral, pasado ese límite se satura esa vía de absorción. Esta es una de las razones por la que se ha comenzado a incorporar la administración intravenosa para los tratamientos contra el cáncer, lo que desencadena respuestas sobre las células glucodependientes como son las células tumorales.

Como un esfuerzo de acercar dosis de mayor concentración a las personas es que se ha desarrollado la vitamina C liposomal, que tiene una biodisponibilidad 400% superior al formato regular (el ácido ascórbico que se compra en la farmacia). ¿Qué significa esto? El nutriente se encapsula en fosfolípidos (ácidos grasos) que permiten una absorción más eficiente y directa. Como resultado, más vitamina C ingresa al torrente sanguíneo teniendo un efecto activo en el cuerpo sin efectos secundarios en el aparato digestivo.

Recuerda que siguiendo la vanguardia en la industria de los suplementos, recientemente en BVITAL LIFE hemos incorporado a nuestra línea de productos: VIT/C-VITAL LIPOSOMAL, la primera y única vitamina C liposomal disponible en Chile y una alternativa real para terapias de mantención o intercurrente a las megadosis de vitamina C endovenosa. Es la formulación de vitamina C con mayor biodisponibilidad que existe hoy en día en el mercado.

Décadas de investigación

La utilización de dosis concentradas de ácido ascórbico como tratamiento contra el cáncer no es algo nuevo. Comenzó en la década de los setenta, cuando el químico Linus Pauling informó que esta vitamina administrada por vía intravenosa era efectiva para tratar la enfermedad. La relación entre la vitamina C y el cáncer fue documentada por Pauling y Abraham Hoffer en el libro “Vitamin C & Cancer”.

El problema es que al tratarse de un producto natural es poco probable que la vitamina C sea aprobada como tratamiento para el cáncer, ya que no puede ser patentado. Al tener ese inconveniente no hay interés en la industria farmacéutica por desarrollar estudios clínicos. Sin embargo, la medicina integrativa, biorreguladora, ortomolecular y regenerativa la ha hecho parte de sus alternativas terapéuticas.

Para más información puedes leer:

Evidencia científica del uso de vitamina C como antivírico y antitumoral

Megadosis de vitamina C: ¿Aliada contra el cáncer?

También puedes ver:

VITAMINA C y CÁNCER ||| Suplementación endovenosa